Escenarios de papel.

Escenarios de papel.

El mayor éxito de la mal llamada “revolución” en Venezuela ha sido, sin lugar a dudas, el haber logrado engranar un poderoso sistema de manipulación mediática tanto a nivel local como internacional, a lo interno fueron expropiando, quitando licencias y creando medios totalmente al servicio de su proceso, adicionalmente mantuvieron ciertos canales dóciles a sus intereses para aparentar amplitud, cuando la verdad es que hoy en día es muy poco el espacio para la información oportuna e independiente, en el plano mundial fueron colocando activistas del partido en lugar de reales embajadores, quienes se encargaron de cumplir la tarea de crear un eficiente tinglado de redes que procuran vender un país de fantasía y es que hasta las grandes cadenas, supuestamente imparciales, vetan ciertas noticias por creer que son mentiras generadas por los enemigos del gobierno.

El tratamiento que se le dio a la espuria decisión del Tribunal Supremo de Justicia fue el inicio de esta travesía que nos coloca frente a escenarios de incertidumbre y desconcierto, para la comunidad internacional en nuestro país no había pasado nada, todo estaba, según ellos, enmarcados dentro de la ¡¿Leyes!? Venezolanas y por lo tanto era clavo pasado, la guinda fue el reconocimiento de hecho, que se le dio al Vicepresidente en la bendita cumbre CELAC-UE y la designación como presidente de la misma al representante de la “democracia” más antigua del continente: Cuba.

Terminado ese capítulo, cada quien se dedicó a lo suyo y a sus manifiestas preocupaciones por proteger sus respectivos beneficios económicos en los ingentes negocios que países como Brasil, China, Colombia, Argentina y USA, mantienen con nosotros, pero igualmente quienes nos chulean sin ningún tipo de pudor como Cuba, a la cabeza, Bolivia, Ecuador, Nicaragua, Uruguay y ese conglomerado de paisitos del caribe, solo ellos sabrán a que acuerdos llegaron con una autoridad bien discutible pero con la cual se siente más que cómodos.

Así el presidente electo, mas no juramentado, y después de 70 días en Cuba, donde firmo decretos, nombro nuevo canciller, hablo y dio instrucciones a sus más cercanos colaboradores, regreso a Venezuela, nadie lo ha visto más allá de ellos, aunque claro ya las leyendas urbanas comienzan a echar cuentos que si entro caminando, que canto un corrió y toda esa sarta de inventos planificados y coordinados por el verdadero poder que nos gobierna, ahora sesudos analistas nos inundan de posibles situaciones que nos esperan en los próximos días, hay de todo, desde quienes desde la oposición piden un “candidato preventivo”, locos de a metra, hasta los que desde el gobierno dicen que él se juramentara cuando, literalmente le dé la gana, así las cosas yo no me podía quedar por fuera y bueno les diré lo que pienso.

En principio es oportuno que nos hagamos la siguiente pregunta: ¿Por qué no se llamó a elecciones de una vez el 10 de Enero?, estaba bombita, la alternativa democrática venia de dos sendas derrotas y el ánimo de toda su estructura por el suelo, adicionalmente el elegido en 30 días iba a ser el ungido en diciembre en cadena nacional, controlada la comunidad internacional todo era cantar y coser, nadie iba a salir a hablar mal de unas elecciones que lo más seguro iban a ser las “más pulcras, transparentes y seguras del mundo”, pero no fue así, desde ese momento lo que hemos presenciado en un sainete de locuras, risas forzadas y fotos montadas dignas de un drama de terror sin final feliz aparente, se metieron en un laberinto y ahora están buscando como salir.

Ahora bien, aquí nada es casual, la presencia y mando de los Cubanos en nuestro país no está en discusión, digan lo que digan los voceros oficiales esta tramoya ha sido montada y orquestada desde la Habana, con anuencia de muchos tanto afuera como adentro, la Constitución Nacional y el marco legal vigente no representa ningún muro de contención natural para ellos, lo que haya que arreglar se hará y por supuesto oiremos cantinflericas explicaciones de voceros supra calificados tratando de justificar lo injustificable, pero que serán refrendadas y acatadas por todos los poderes, es que el monitoreo sobre quienes hoy fungen como los “líderes del proceso” no les ha dado buenos resultados a quienes llevan la batuta, estas figuras no terminan de convencer, su calado en sectores populares sigue siendo pobre y su lucha a cuchillo a lo interno, solo mantenida a raya por las ansias del poder, no augura permanencia en el tiempo.

Adicionalmente el anuncio de la devaluación, hecho un viernes luego de cerradas las operaciones bursátiles y en la víspera de 4 días libres por Carnaval, les prendió la alerta de sus peores temores, Chávez es el único que puede controlar con éxito lo que irremediablemente se nos viene encima en materia económica, de tal forma que hay que mantenerlo a “flote” a como dé lugar, mientras se logra estabilizar a estos sustitutos y el proceso no corra peligro de morir naufragado, claro, el papel todo lo aguanta y si algo ha demostrado la historia y particularmente la de nuestros pueblos latinoamericanos, es que del sitio menos pensado salta un asomao y hecha a perder lo que tanto costo hilvanar.

Habrá elecciones cuando esta “sociedad de amigos” que gobierna a Venezuela en la actualidad así lo decida, para ellos aquí no vale ley alguna, ni reconciliación, mucho menos el interés nacional, solo vale sus voces, su verdad y su, según, revolución en favor del pueblo.