viernes, 20 de marzo de 2015

La Patrias y las Patrias.

Ha sido una constante el manoseo que sobre la soberanía y la independencia ha realizado el actual régimen a lo largo y ancho de estos 16 años en el poder, miles de arengas nacionalistas han recorrido en sus interminables cadenas, para exponer la segura invasión gringa a estas tierras del sur, bañadas por las bravías aguas caribeñas.
¡Yankees go home! Gritan desaforadamente desde las máximas y las mínimas alturas del oficialismo, tanto unos como otros juran defender hasta el final a la Patria de la planta insolente del invasor, claro para los primeros existen varias y coloridas patrias, para los segundos una sola, y esta, es en extremo diferente a la que manipuladoramente pretende el gobierno vender.
En la Patria estamos todos por igual, víctimas de una monstruosa violencia criminal, que no distingue en lo absoluto, diferencias entre nuestros cerebros, simplemente nos arrebata la vida por que le da la gana, mientras, en las otras patrias viven rodeados de escoltas, guardaespaldas y un séquito interminable de anillos de seguridad para salvaguardarlos precisamente de aquello que según el propio régimen no existe, o en el peor de los casos es marginal.
En la Patria tenemos que torear una inflación del 200%, con una canasta básica familiar de 20 mil bolívares, un salario mínimo de 5.622, un bono de alimentación de 112 que apenas nos da para un perro caliente más un jugo y una escasez que nos ha hecho convertirnos en mendigos de los mercados, sin embargo, por el lado de los enchufados la presencia del escocés del bueno no ha faltado, el bacalao y las huevas mucho menos, y el jamón de bellota continúa adornando las bandejas que se sirven en sus continuos ágapes.
En la Patria ya el 48,4% de los hogares se encuentra en situación de pobreza, destinan 45 bolívares de cada 100 para la comida que logran conseguir y están gordos, ¡claro que sí!, si lo fundamentalmente que comen es arroz, pasta, pan y arepa, del lado de las patrias coloridas algunos están gordos también, lógico, los churrascos argentinos y uruguayos son realmente apetitosos, dedican gran parte de sus ingresos a viajar y a comprar bienes en ciudades profundamente capitalistas, pero que importa así funciona este socialismo, las patrias para los rojitos de la oligarquía, la patria para los pata en el suelo.
La salud en la Patria huele a formol, a desidia, a humillación, no hay gasas, ni medicamentos, ni inyectadoras, no existe respeto por quienes trabajan allí, ganan sueldos miserables, los asaltan, los matan y encima los amenazan si se les ocurre denunciarlo, en cambio, en las otras todo funciona, no te mueres de mengua, al contrario, los verdes funcionan de maravilla, te tratan como de 5 estrellas y puedes operarte de todo lo que se te antoje, cosas del color digo yo, en la patria todo es negro y blanco, en las patrias como abundan los colores.
De remate la Patria está hipotecada, no fueron suficientes más de 900 mil millones de dólares de ingresos por petróleo, le debemos a los chinos y rusos hasta la manera de caminar, cambiamos petróleo por quesos, estamos empeñando hasta el oro para continuar la fiesta, al contrario, en las patrias abundan los bolsillos repletos del erario público, de pillos que han construido fortunas a costa de la Nación, de traficantes de toda calaña que tienen su futuro y el de sus generaciones asegurado, de cuentas en paraísos fiscales y bancos como el del principado de Andorra, de maestros del engaño, que se rasgan las vestiduras por la patria pero por atrás se enriquecen más y más de los imperios que tanto critican.
La patria mis queridos hermanos, es esta, la de todos nuestros días que millones vivimos y padecemos, esa que nos reclama que actuemos, que reaccionemos, que la defendamos, que la salvemos.

Super Jalisco

Dice un viejo refrán que no hay peor sordo que aquel que se niega a oír, definitivamente ése parece ser el caso venezolano, basta ver la cantidad de advertencias, tanto de adversarios como hasta de identificados con el proceso, para darse cuenta de que en serio debe rectificarse el camino escogido; sin embargo, la respuesta es exactamente contraria, se pisa a fondo el acelerador de la prepotencia, la imposición y aquí mando yo.
Ya a estas alturas, debe conocerse en detalle la operación de un nuevo préstamo a cuatro años que tramita el gobierno, mediante un procedimiento llamado swap o lo que es lo mismo, un canje de 1,4 millones de onzas troy de nuestras reservas en oro por 1.500 millones de dólares, podrán negar y correr la arruga, lo cierto es que cuando esta notas salen a la luz pública son hechos ciertos y responden a que financieramente nada de esto se puede ocultar.
Y aquí es donde empieza realmente a verse en profundidad el tamaño de la crisis económica que enfrentamos; que el régimen la niegue y continúe empeñando cada día más al país no hace que ésta desaparezca; por el contrario, aumentan las dudas sobre hasta qué punto está comprometida la nación frente a acreedores extranjeros, recordemos que es muy poco lo que ciertamente se conoce de los convenios firmados con países amigos en la búsqueda de más y más dinero para paliar la situación.
Nadie tiene derecho de hipotecar el futuro de las generaciones de un país solo por ostentar temporalmente el poder, no se puede seguir jugando al macho de la partida y simplemente pretender que llueva, truene o relampaguee van a instalar su manido socialismo en Venezuela, nunca fueron elegidos los actuales gobernantes para tal desaguisado, muy por el contrario, el pueblo lo que realmente espera es que se le solucionen de una vez por todas urgentes y mucho más mundanos problemas que nos aquejan en estos últimos 16 años de pretendida revolución.
No es cualquier pelusa de mono, este régimen ha manejado ingresos como para sacar toda África de su penosa miseria; lamentablemente para nosotros, lo que ha habido ha sido la conjunción de un gigantesco despilfarro, casado con una monstruosa corrupción que ha carcomido los pocos cimientos institucionales que aún nos quedan en esta tierra, solo en estos días retumba la noticia de la intervención de una entidad financiera en Andorra por lavado de dinero y ya sale a relucir en las primeras de cambio que fueron limpiados unos 2 mil millones de dólares por parte de supuestos funcionarios venezolanos.
Nada se va a solucionar recurriendo nuevamente al tema de esta especie de guerra de las galaxias a las que ha convocado el gobierno, tampoco resolverá la cruda e inocultable crisis de desabastecimiento la masiva instalación de miles de captahuellas en aras de enfrentar la supuesta guerra económica, mucho menos ahora buscando súper poderes, que lo que generan es temor en que simplemente sean usados como excusas para profundizar aun más la persecución a la disidencia; insisten desgraciadamente quienes nos dirigen en continuar negando su directa y única responsabilidad en los males que nos aquejan, y en lugar de buscar vías de entendimiento honestas y sinceras, recurren al mero macho: si no puedo, arrebato.
Quienes me leen saben que siempre he mantenido la necesidad de entendernos en nuestras diferencias, soy un demócrata convencido y confeso, pero las continuas acciones desde el poder parecen buscar otra cosa, nos acorralan y encarcelan, destituyen y secuestran autoridades legítimamente elegidas, se continúa en el expediente de llamarnos golpistas por pensar diferente, se escoge el camino, no de la lucha democrática, al contrario, del aniquilamiento de la disidencia y esa ruta a nada bueno nos llevará.

jueves, 5 de marzo de 2015

Yo soy Candidato #Carabobo #Venezuela

No ha habido un día desde que se inició este manido proceso, que no he estado en la línea de la lucha democrática, acompañando con mi granito de arena en el tema electoral, en kilómetros de marchas, en encuentros permanentes para oír, sentir y palpar a los más vulnerables, en mis escritos y denuncias sin miedo y por la calle del medio, trabajando sin descanso por conquistar nuevos espacios para el avance de las fuerzas republicanas, contribuyendo donde sea necesario de manera sincera y empeñado en mantener una línea honesta, sin desvíos ni ambigüedades, con el urgente e impostergable cambio que nos reclama la verdadera patria, la olvidada, la pisoteada y arruinada por estos destructores, dizque, socialistas.
Desde mis tiempos juveniles cuando contagiado por el sarampión izquierdista, soñaba con una Venezuela distinta, de oportunidades reales para todos, democrática, auténticamente participativa y donde el presente fuese definitivamente algo, que nos hiciera siempre tener fe y esperanza en nosotros y el futuro.
En la Universidad de Carabobo, mi alma mater, comprendí, luego de un tiempo, el verdadero rostro del comunismo y entendí que es bajo el sistema de libertades ciudadanas que ciertamente prospera un país y su gente, me preparé académicamente y enriquecí mis conocimientos con una larga y exitosa vida profesional dentro de la empresa privada, hoy continuo procurando aprender cada día más, mantenerme siempre actualizado para estar en plena capacidad de afrontar adecuadamente los retos que el presente coloque frente a mí.
Así mis queridos amigos, que concluyentemente, para que todos lo oigan de manera clarita y sin que quede ningún resquicio de duda alguna, yo soy candidato.
Candidato a vivir en una Venezuela mucho pero mucho mejor, donde no se te persiga, se te encarcele y se te procure acabarte moralmente por que pienses diferente a quien ostente el poder en ese momento, donde puedas expresarte de manera libre y sin presiones, dentro del marco legal vigente, pero que en cualquier caso, tengas derecho a la legitima defensa, a una justicia imparcial y honesta, a ser juzgado bajo el respeto de tus derechos y por tus jueces naturales, al final a vivir bajo el imperio de un país con instituciones fuertes, descentralizadas y con un innegable respeto por el pueblo.
Candidato a tener adecuadas oportunidades para un trabajo digno, donde no necesite inscribirme en ningún partido político para poder tener acceso a algún beneficio que por ley me pueda corresponder, tener la certeza que con mi esfuerzo puedo garantizarme a mí y a mi familia una idónea calidad de vida, con opción a tener una vivienda decente, una alimentación equilibrada, donde no tenga que madrugar y pasar horas y horas en una cola para mendigar lo que por derecho me he ganado.
Candidato a ser respetado como ser humano, donde exista un sistema de salud que me permita tener la tranquilidad de no morirme por no tener recursos para costear algún tratamiento, de que tengamos hospitales de primera, con médicos, enfermeras, asistentes venezolanos a quienes no les falte nada para atender a sus pacientes y tengan sueldos que les permitan desarrollarse.
Candidato a una educación de calidad, sin minestrones ideológicos ni alienantes procesos de lavados de cerebro, donde el Estado asuma el supremo deber de preparar al pueblo, una educación que transforme integralmente al individuo y que se convierta en la piedra angular de las transformaciones necesaria para el país, con docentes preparados, formados, entusiasmados en educar, con suficientes incentivos sociales y económicos para abocarse a la tarea de cambiar el presente y el futuro, cambiando la educación.
Candidato a vivir en alegría, en armonía con los demás, en una paz real y sin miedo.