Abril en Venezuela.

Delirios de Abril.
Ha escogido el régimen agarrar el mes de Abril para volver a sacar todos los baúles latinoamericanos del olvidado tema militar en vano intento por torcer la historia republicana, presentar hechos históricos completa y totalmente tergiversados y por supuesto aprovechar para seguir enviando mensaje de terror y miedo a todos los ciudadanos, desde que comenzó el mes se iniciaron los show mediáticos de nuevas guerras, lo que por supuesto hace necesario la compra mil millonarias de armamento a Rusia, uno de nuestros nuevos amigos internacionales, se desempolva, ¡ otra vez!, el bendito magnicidio por parte de la oligarquía y el imperio, se nos presenta ese grotesco desfile del 19 donde se exalta nuevamente la fuerza militar sobre el civil y donde sobro lo simplón y novelesco de la comparsa, finalmente el día que la alternativa democrática realiza su proceso de primarias se antoja de vestir la pantalla de verde oliva y claro repetir el discurso conocido por todos, un nuevo paseo por aquí mando yo, dispongo yo y se hace lo que a mi me de la real gana, nada que ver con esos problemas terrenales de los compatriotas venezolanos que son definitivamente pequeñeces en comparación a la heroica tarea de implantar el Socialismo del siglo XXI.
Frente a esto es fundamental no perder el rumbo que nos hemos trazado, lo de este 25 fue apenas un paso, fuerte y claro, hacia la construcción de un verdadera opción que despierte sinceras manifestaciones en la gran mayoría de la población de Venezuela y procure irle devolviendo la fe y esperanza perdida en muchos de nosotros, no es crear falsas expectativas, ni generar ilusiones vanas y definitivas, es entender un camino rocoso que requiere de la fuerza y el coraje de todos, aquí solo sobran los arribistas, los quinta columnas y los que han hecho de la política una mercancía que se le vende al mejor postor, el resto, que son la gran mayoría, son los necesarios para caminar hasta ir alcanzando nuestros objetivos.
Hoy debemos comprender que es esencial seguir haciendo lo que venimos haciendo, exigir honestidad y entrega a nuestros líderes, pero sobre todo ser parte activa y militante de las luchas por venir, en cada uno de nuestros trabajos o actividad, nada es poco frente a un régimen que no tiene ninguna vergüenza en usar todos los recursos e instituciones publicas para sus propósitos políticos. Defendamos como ciudadanos lo que creemos justo, para después puede ser demasiado tarde.