Buche y pluma

Tienen los alcaldes responsabilidades naturales inherentes al cargo para el que fueron elegidos con el voto popular, que representan de alguna forma las necesidades básicas que deben resolverse para garantizarle a la sociedad un mínimo nivel de vida que les permita contar con un servicio de agua normal y constante, un sistema de recolección de basura que por lo menos impida la insalubre acumulación de desechos, una adecuada red de distribución de energía eléctrica, el mantenimiento y asfaltado de las calles y avenidas del municipio, tener un transporte publico decente y generar el crecimiento de la ciudad mediante la creación de incentivos fiscales y tributarios para la instalación de empresas privadas que aupen el empleo, la transferencia tecnológica y el respeto por el ambiente, nada del otro mundo, esa es su obligación directa y elementales que conlleva el cargo, porque no hemos hablado del idóneo nivel calidad que deben tener esos servicios y programas, solo establecimos lo fundamental para poder llevar una condiciones de vida que nos acerque a los seres humanos y no vivir como camellos muertos de sed, o como nuestros abuelos iluminándose con velas y subsistiendo de la caza y la pesca.

La enorme deuda acumulada por los gobiernos locales afectos al proceso son imposibles de tapar con shows de mucha espuma y poco chocolate, no hay sustancia en los últimos 9 años, solo dos gestiones, una en extremo desastrosa e indolente y otra totalmente entreguista que pretende presentar el cumplimiento de sus obligaciones naturales como algo fuera de este mundo, cuando en realidad solo esta resarciendo en parte el abandono al que los camaradas sometieron a este pueblo, en todos estos tiempos donde adicionalmente han manejado enormes recursos, que debieron utilizarse para convertir a la ciudad en una verdadera tacita de plata y no en enriquecer obscenamente a incapaces funcionarios municipales que aun ejercen funciones tranquilamente mientras las comunidades se caían a pedazos.

Es la actividad portuaria alma, corazón y vida de Puerto Cabello, su razón de ser y lo único que puede servir de base para iniciar un desarrollo integral de todos los sectores de la sociedad, sin embargo, lo que vemos en la actualidad es una puñalada trapera hacia los porteños, al regalar al poder central el puerto y salir a rogarle a Bolipuertos que nos envíe una maquinas “compactadoras de basura”, casi nada pues, los propios espejitos por la joya de la corona, pero no solo eso, serán dos señores de Caracas quienes recibirán los contratos principales y llenaran sus arcas mientras a uno que otro que quede aquí de comparsa le darán migajas de la torta. A mis amigos trabajadores que estén ojo pelao, los van a mantener como a los compatriotas de Sidor, que aparte de cercenar cualquier cantidad de derechos, ahora reducen costos a sus costillas, con la amenaza del que no le guste para fuera, solo 77 millones de dólares perdió la empresa en el mes de Julio y por supuesto los platos rotos los pagan los mas pendejos.

Buche para gritar y avasallar al que se atraviese y plumas para tapar la realidad que nos espera sino reaccionamos reclamando lo que por derecho le corresponde todos y cada uno de este noble pueblo.