Tres cosas innegables han
marcado nuestro panorama luego de la estafa del 30 de Julio, lo primero y más
contundente ha sido, sin lugar a dudas, el enfriamiento total de la calle, de
manera impresionante los sectores dominantes dentro de la alianza opositora,
decidieron hacer una especie de pausa entre cantinflericas y confusas
explicaciones, luchar y votar decían, pero inmersos cada uno en sus propias
ambiciones, no le quedaba tiempo para más nada.
Lo segundo fue un
reconocimiento de hecho y de derecho, de la que hasta ese día, llamaban un
“fraude” y una “prostituyente”, como también llegaron a etiquetarlas connotados
dirigentes blancos, azules, naranjas y aurinegros; legitimaron el nuevo poder
constituyente al inscribirse y avalar con sus actos el timo de las regionales.
Por último, el
descubrimiento el 31 de Julio por parte de estos mismos actores de que estaban
programadas unas elecciones locales, ¡Barbaros!, pautadas y programadas por el
CNE desde antes del engaño constituyente, sin ningún tipo de discusión
decidieron participar en aras de, según ellos, no ceder espacios, de que, ahora
sí, con 23 gobernaciones en nuestro poder Maduro esta frito, de que es un acto
de rebeldía, de que no hay forma de cometer fraude porque ellos están allí y de
que su lucha es pacífica y asistirán a cualquier evento electoral en las
condiciones que sean, es más, rematan diciendo que “como nos las pongan la
bailamos”.
Vamos a ver, ¿alguno se acuerda
de la oferta que con la mayoría en la asamblea nacional, en 6 meses el hombre
estaba fuera del poder?, ¿pueden más 23 gobernadores que 112 diputados?, ¿Cómo
se come la rebeldía, si sumisamente aceptas todas las ilegales condiciones que
te imponen?, si en definitiva la idea es no ceder espacios, en asistir a los
eventos electorales porque con nosotros no hay trampa posible, ¿por qué no
fuimos a la elección de la asamblea constituyente?, en el peor de los casos,
sino lográbamos la mayoría, tendríamos por lo menos unos 250 constituyentistas.
Maduro definitivamente, estaría temblando frente a tamaño supra poder
originario y no solo quedaría desnudo frente al mundo, estaría el pobre en sus
cueros.
La verdad es que nuevamente
la música y su ritmo lo está poniendo el régimen, pero no solo eso, también
decide cual tipo de melodía es la que mejor le conviene, la cambia a su antojo,
resuelve si hace una pausa, si la acelera o si la rebobina, elige con quien se
puede bailar, donde puedes hacerlo, a qué hora y si vas desnudo o vestido, si
es con ropa te hace el traje y si es en cuero, te impone el color, así de
sencilla y trágica es la situación, si eres sumiso te premio, si eres
contestatario te anulo.
Con estos hechos consumados
siento que ya es hora de dejar atrás el tema de las regionales, quienes se
inscribieron y van a participar en este desfile de vanidades, que les vaya
bien, a quienes no asistiremos nos toca agruparnos, unirnos y ciertamente
continuar una lucha profundamente constitucional, que no necesita pintarse de
nada, solo de Venezuela.
Las agendas y los cálculos
hace rato quedaron en el desfase, hoy corresponde decidir si queremos vivir en
libertad o si preferimos deambular en sumisión.
Y no me refiero a una
libertad etérea, me refiero a la libertad de vivir plenamente, de escoger tu
camino, de tener desde como cubrir tus más básicas necesidades, hasta la total
posibilidad de decidir en libertad lo que cada uno quiere ser, estamos en el
umbral de definir lo que puede sobrevenir para este país y para todos nosotros
por la próxima generación, de nuestras actuaciones hoy estará marcado el
destino de nuestros hijos.
No cedamos ante el chantaje
y la manipulación, es la hora de Venezuela, sin perder la fuerza y la
esperanza, entendamos y asimilemos la dureza de lo actual, solo así podremos
lograr el poder de cambiar las cosas y tomar el control de nuestro destino, es
entre la Libertad o la Sumisión.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Con Moderacion y Respeto TODOS son Bienvenidos.