viernes, 12 de septiembre de 2014

#Venezuela : Espacios Futuros.

Eduardo Sánchez
Tú puedes tener las ideas que sean, anacrónicas, básicas, modernas, extremistas o conservadoras, pero si no tienes suficientes fuerzas materiales, la profunda crisis en la que seguimos avanzando te llevará en los cachos.
Los más preparados y espiritualmente más comprometidos podrán eventualmente capear parte del temporal y resurgir al cabo de unos años, a los menos afortunados y consecuentemente peor afectados les esperan años de durísimo padecer, no son cuentos ni petulancias, son realidades frente al gigantesco abismo que horadaron quienes hoy insisten impolutos y cínicos en su "bendito modelo".
No existen índices serios, económicos o sociales, donde Venezuela salga bien parada, hemos roto los rankings de corrupción, de falta de competitividad, de opacidad en las finanzas públicas, de pésimos servicios, de aumento de la pobreza real y evidentemente nadie sale bien librado después de haberse llevado tales honores.
No solo está partida la médula central de nuestro corazón económico, el daño moral infligido por estos revolucionarios de mentira dentro de toda nuestra sociedad ha sido la semilla perfecta para toda esta debacle y anarquía que vivimos a diario, ni cuadrantes, ni militares, ni millones de policías podrán resolver la cosecha de lo sembrado, hace falta mucho más que eso para iniciar una reconstrucción de valores, los tipos han dinamitado nuestro espíritu como nación.
Podríamos pasar horas y horas hablando de las escalofriantes cifras que sobre nuestra economía y finanzas se ciernen, desconsolarnos ante tanta y tanta muerte sin sentido, mortificarnos mutuamente frente a los panoramas que ya tenemos con nosotros, pero eso de nada nos serviría, tan solo confirmaríamos que los pendejos, la gigantesca mayoría de éste y cualquier país, son los que vamos a pagar los platos rotos.
Horas y horas de cadenas, de amenazas, de anuncios grandilocuentes y de su reconocida y marcadísima impudicia no van a ser suficientes para lograr nuevamente manipular a las grandes masas, podrán adormecer un tiempo, lograr ganar períodos, gracias a la manipulación y ciertamente a la represión, pero no tienen la más mínima intención de resolver los graves problemas, llevados por ellos hasta el máximo posible, que nos aquejan, se enquistaron en el poder y ahora solo les interesan sus fortunas y sus imperios. Ahora, nadie está seguro de lo que viene en el futuro, la clase dirigente en general ha sido sobrepasada con creces por las circunstancias, a los ojos de la mayoría de los venezolanos todos somos corruptos o buscamos el mando para propio beneficio, el momento de los incrédulos abre el tiempo de los que no creen en nadie y de quienes profesan el sálvese quien pueda o el último que recoja los vidrios, la antipolítica hace estragos y avanza tan rápido como el cáncer económico y social, los nubarrones no tienen un solo color, su oscuro presenta tonalidades particulares.
La calle bajo toda esta marea de acontecimientos va formándose su propio destino, algo sumergido en nuestras propias entrañas se mueve, a veces en silencio, en ocasiones con gritos, pero siempre con recelo y desconfianza, los rostros en las busetas podrían servirnos para escribir un pesado libro de los sentimientos que nos pasan por la mente, no es en Twitter, tampoco en los medios y mucho menos en el resto de las redes sociales donde se dilucidará lo que pronto parirá.
La cosa es que para los seres humanos los lapsos son muy cortos, por lo tanto tendemos a visualizar los acontecimientos en la premura de nuestra propia existencia, no aceptamos que lo social y político tiene su propio ritmo, por eso nos desesperamos y asumimos hechos que ni siquiera terminan de ser realidades.
Los espacios están abiertos, ni buenos ni malos per se, solo son eso.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Con Moderacion y Respeto TODOS son Bienvenidos.